El pan árabe o jebz es muy conocido en
el mundo árabe. Nosotros lo conocemos gracias a los kebab, aunque es
cierto que este tipo de tortitas, con alguna variación en sus
ingredientes, se elaboran en distintos países. Yo hasta hace muy poco
las compraba en los supermercados, pero desde que vi este vídeo en
Internet, prefiero hacerlas yo misma. Es muy sencillo y el sabor es
mucho mejor que el de las tortitas compradas. Así que nada, ya no tenéis
excusas para no hacerlas vosotras y vosotros mismos. Ya me contaréis...
Ingredientes:
Ingredientes:
1 cucharilla de azúcar
1/2 taza de agua tibia
3 tazas de harina de trigo (para la masa)
1 taza de harina de trigo (para dar forma)
1 taza de harina de trigo (para dar forma)
1 cucharilla de sal
agua tibia
Preparación:
Primero tienes que preparar el
prefermento. Para ello mezcla la levadura con la cucharilla de azúcar y
la 1/2 taza de agua tibia. Deja reposar unos diez minutos o hasta que
haga espuma. Es importante que la sal no toque directamente la
levadura, por ello mezcla bien aparte 3 tazas de harina y una cucharilla
de sal. Añade al prefermento la harina y la sal bien mezcladas. Mezcla
con una cuchara de madera y añade un poco de agua. Tienes que dejar
reposar la masa durante dos horas. En el bol donde vayas a dejar la masa
reposando, echa un buen chorrón de aceite de oliva y con las manos unta
bien toda la masa (ver foto 1 más abajo). Cubre el bol con un paño y
déjalo en un lugar cálido dos horas.
Pasado este tiempo, verás como la masa ha aumentado de volumen y se a ablandado (ver foto 2 más abajo). Echa la taza restante de harina sobre la mesa de trabajo y comienza a amasar ahí la masa (ver foto 3 más abajo). Poco a poco vete incorporando la harina y amasa durante diez minutos hasta conseguir una masa homogénea y elástica. No es necesario incorporar toda la harina, de hecho, es mejor dejar algo para cuando aplastes con el rodillo las tortitas. Así no se pegarán a la mesa. Pasados los diez minutos de amasado, estira la masa como si fuera un cilindro (ver foto 4 más abajo).
Pasado este tiempo, verás como la masa ha aumentado de volumen y se a ablandado (ver foto 2 más abajo). Echa la taza restante de harina sobre la mesa de trabajo y comienza a amasar ahí la masa (ver foto 3 más abajo). Poco a poco vete incorporando la harina y amasa durante diez minutos hasta conseguir una masa homogénea y elástica. No es necesario incorporar toda la harina, de hecho, es mejor dejar algo para cuando aplastes con el rodillo las tortitas. Así no se pegarán a la mesa. Pasados los diez minutos de amasado, estira la masa como si fuera un cilindro (ver foto 4 más abajo).
Después, corta porciones de unos 45 gramos. Dale forma de bola a cada porción y déjalas reposar tapadas con un paño 5 minutos más. Coge una porción y aplástala con los dedos dándole forma redondeada (ver foto 6 más abajo). Comienza a aplastarla con el rodillo. Después de pasar cada vez el rodillo (ver foto 7 más abajo), levanta la tortita y gírala 90 grados. Vuelve a pasar el rodillo (ver foto 8 más abajo) y vuelve a girarla 90 agrados. De esta forma, obtendrás una tortita redondeada.
Sigue haciendo esto hasta conseguir una torta muy fina (ver foto 9 más abajo). Ahora
lo único que te queda por hacer es freírlas en la sartén. Echa un poco
de aceite de oliva en una sartén antiadherente. Quita el exceso de
aceite con papel absorbente y calienta la sartén. Echa la primera
tortita y cuando se dore ligeramente, dale la vuelta. Las burbujas que
se harán las puedes dejar o pinchar con un cuchillo. El grosor de cada
pan lo dejo a tu elección. En casa nos gustan muy finos, ligeramente
gruesos e incluso bien hechos y crujientes.
Según los vayas sacando de la sartén cúbrelos con un trapo. Una vez hechos todos los panes (con estas cantidad salen unos 10 panes) rellénalos de lo que más te guste (ingredientes del kebab o jamón, salsa de tomate, mozzarella fresca y rúcola, por ejemplo).
Según los vayas sacando de la sartén cúbrelos con un trapo. Una vez hechos todos los panes (con estas cantidad salen unos 10 panes) rellénalos de lo que más te guste (ingredientes del kebab o jamón, salsa de tomate, mozzarella fresca y rúcola, por ejemplo).
No hay comentarios:
Publicar un comentario